Lo voluble del clima se compara con lo voluble de un pueblo indeciso e inseguro. Revivir Tlaxco es importante si queremos sobrevivir a estos tiempos de locura.
No todo es culpa del cambio climático, también es culpa de un sistema mal hecho que permite estén dentro seres de naturaleza primitiva.
Nada se ve en las calles de un municipio como Tlaxco, aunque hay quienes se resisten a estos fenómenos negativos y recuerdan, añoran, piensan en algo mejor.
Repetimos nuestros pasos, en los momentos más importantes carecemos de memoria e insistimos en señalar al mismo lugar. Después nos arrepentimos o simplemente nos exculpamos y aceptamos nuestra ignorancia, siendo todo lo contrario. Jamás aceptamos nuestro interés en algo personal.
Vacío todo, puros programas demagógicos y gestiones sin sentido progresista. Son comerciales para idiotizar y exponer la pobreza del pueblo, para exponer sus debilidades. Programas que ningún valor tienen para quien lo necesita, apoyos que nacen de la pereza gubernamental apaciguante de espíritus cansados de tanta hambre.
Qué más queremos, hay que esperar tres años más para ver otra vez como pintan parque, banquetas, calles, etc. Eso siempre quita la calor.
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