Traficantes de mariguana de poca monta,
los integrantes de La Familia se han convertido en
sólo ocho años en una mafia extremadamente violenta
con capacidad para poner en jaque al Estado.
En palabras de los magistrados del tribunal que
revisaron las más de mil fojas del expediente del
“michoacanazo” de mayo de 2009:
“Los jefes de La Familia trafican cocaína, marihuana,
metanfetaminas y heroína. Realizan levantones y
ejecuciones. Lavan dinero. Compran vehículos robados
y trafican armas. Captan autoridades a cambio de
dinero. Coordinan con los partidos la selección
de los candidatos y sus colaboradores a las diferentes
presidencias municipales, e insertan miembros de la
organización criminal en los tres niveles de seguridad
pública para controlar sus acciones”.
El expediente completo, del cual emeequis obtuvo una
copia, es un verdadero manual de cómo se construye una mafia.
los integrantes de La Familia se han convertido en
sólo ocho años en una mafia extremadamente violenta
con capacidad para poner en jaque al Estado.
En palabras de los magistrados del tribunal que
revisaron las más de mil fojas del expediente del
“michoacanazo” de mayo de 2009:
“Los jefes de La Familia trafican cocaína, marihuana,
metanfetaminas y heroína. Realizan levantones y
ejecuciones. Lavan dinero. Compran vehículos robados
y trafican armas. Captan autoridades a cambio de
dinero. Coordinan con los partidos la selección
de los candidatos y sus colaboradores a las diferentes
presidencias municipales, e insertan miembros de la
organización criminal en los tres niveles de seguridad
pública para controlar sus acciones”.
El expediente completo, del cual emeequis obtuvo una
copia, es un verdadero manual de cómo se construye una mafia.
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