Arremeten nuevamente

Por Jorge Esteban López García

Cuando los tianguistas decidieron contratar perifoneo para ofrecer al pueblo su versión de los hechos, no previnieron que las autoridades censuraran su voz y que sería motivo de encarcelamiento para una persona originaria de Tlaxcala.

Pagaron este servicio para invitar a los ciudadanos de Tlaxco a que no se molestaran por lo sucedido, invitándoles a comprar en el parque y a que ayudaran a encontrar una solución. Pero la policía prohibió a quien contrataron para que no lo hiciera.

En ese momento y cerca estaba una persona de Tlaxcala, quien fue a defender la libre expresión del perifonista, pidiéndoles que lo dejaran trabajar y que mejor ayudarán a evitar más problemas. Los policías molestos le dijeron que se callara. Obedeciendo, vio como insistían con la otra persona, otra vez les dijo que lo dejaran. Molestos, los guardianes del orden se lo llevaron a la comandancia, no le dejaron hacer una llamada, no le dijeron por qué estaba encerrado y lo trataron como delincuente. Minutos después un policia hizo la llamada a uno de los parientes del custodiado, quienes por fin lo vinieron a ayudar. 

Para salir pagó 900 pesos, pidió su recibo y le dijeron que no había, entonces pidió que le hicieran en un papel un recibo y que lo firmaran. 

Esto fue el jueves. El viernes esa misma persona vino a Tlaxco, pero acompañado de funcionarios de Derechos Humanos. Cuando entraron a la comandancia buscaron al policía que lo había encarcelado, y el policía decía no haberlo visto, pero cuando le mostraron el papel ya se acordó.

Le regresaron sus 900 pesos al afectado y seguramente le extenderán una recomendación a la Dirección de Seguridad Pública, también al Ayuntamiento de Tlaxco.