La Guerra Sucia

Por Jorge Esteban López García

Salió la primera víctima de la Guerra Sucia, Germán González Grant, quien es acusado de un fraude realizado durante su período como Director de Turismo a comerciantes tlaxquenses. El Ayuntamiento de Tlaxco, en voz de su área de Comunicación Social, deslinda al actual Presidente Municipal de cualquier responsabilidad, inculpando al ahora candidato a la Presidencia Municipal de Tlaxco.

También han salido denostaciones en contra de Juan Carlos Islas, asegurando que es el candidato de Jorge Rivera y que continuará con sus proyectos, lo cual no es cierto, pues el candidato del PAC tiene su propia estructura y asume estar rodeado por el mejor equipo de campaña.

Armando Flores también ha sido atacado, arguyendo que su carácter no es el mejor, pues no es la persona sencilla y de buen trato que merece el pueblo. Pero él se defiende con la noble postura de no somos perfectos y tampoco le vamos a caer bien a todos.

Rafael Goyri, aunque lo quiera defender, es imposible, puesto que su idea de crear un Santo (aunque haya sido broma), indica poco sentido del humor y ofende al pueblo, pues le dice ignorante e ingenuo, al intentarlo engañar con tal "argucia".

De allí nos vamos a los argumentos que discriminan u ofenden. Algunos candidatos son tratados de nacos, mugrosos, desconocidos, pobres, etc., demostrando el criterio de la población para elegir a sus representantes. Por qué no los descalifican por sus propuestas, por su forma de tratar a las personas de todos los sexos, por su forma de proponer, por su inteligencia, etc.

Lo que busca la ciudadanía es votar por quien sea, sin saber si es el mejor, el menos peor o el peor, sólo quiere votar y lo demás, no le importa. Allí está el error. Por eso la frase tan usada en estos tiempos: "Votaré por el que sea, de todos modos me va a robar..."