Por Don Ricardo Fernández de Lara
DON FLAVIO ZAMORA
Don Flavio tenía un perro muy famoso que se llamaba "El Charro". Un día en el monte pasó junto a ellos una liebre y el charro se fue corriendo tras ella. Al poco rato pasaron junto a don Flavio, a toda velocidad. Poco tiempo después pasaron una vez más y se dio cuenta que el perro no la podía alcanzar.
Entonces don Flavio decidió esperarlos cuando pasaran nuevamente y que le dispara a la liebre, que fue a dar allá lejos dando vueltas. Se acercó al lugar donde cayó la víctima y cual sería la sorpresa de don Flavio, la liebre tenía 8 patas, 4 hacia abajo y 4 hacia arriba.
"Pues claro, nos dijo don Flavio, cuando se cansaban unas patas, se daba la vuelta y corría con las otras y por eso el perro nunca la pudo alcanzar."
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