Mariana, ¿cuál será tu trabajo en San Lázaro?
Aspirar a ser diputada es comprometerse con una responsabilidad continua hacia la mejora del entorno de la población a la que espero representar. Durante esta campaña, mi compromiso con la población del Distrito Uno Federal de Tlaxcala es total. Me esfuerzo por ser una candidata cercana a la gente, alguien que no sólo escucha sino que actúa, con el objetivo de convertirme en su digna representante en el Congreso de la Unión.
Mi visión se centra en estar permanentemente informada sobre los problemas que enfrenta nuestra sociedad para, de ser electa, contribuir activamente a su solución a través de cambios legislativos y políticos que se requieran. Este compromiso implica una serie de responsabilidades críticas, como la participación en la expedición del bando solemne para la declaración oficial de la presidenta electa, la coordinación y evaluación del desempeño de la Auditoría Superior de la Federación, la aprobación anual del presupuesto de ingresos de la Federación, la determinación de proceder o no penalmente contra servidores públicos, y la revisión de la cuenta pública del año anterior.
Cada una de estas tareas es esencial para garantizar la transparencia, la rendición de cuentas, y el uso adecuado de los recursos públicos, siempre buscando el beneficio de nuestra sociedad y el desarrollo sostenible de nuestra nación. Aspiro a dejar claro que ser diputada no significa repartir dinero; significa ser una voz en el congreso que defiende el bienestar y el progreso de todos, especialmente de aquellos a quienes espero tener el honor de representar.
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